sábado, 21 de junio de 2014

La casa japonesa: el baño (nihon kaoku: ofuro to toire, にほんかおく: おふろとトイレ, 日本家屋:お風呂とトイレ)


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Es momento de analizar las casas niponas, especialmente los cuartos que se diferencian de los que conocemos en España y en otros países occidentales, que no son pocos.

La mejor manera de empezar, además, es meterse de lleno en la intimidad del hogar. Esos lugares que, pese a ser extremadamente funcionales, son los menos estéticos de todos: los baños.

La primera sorpresa en Japón es que lo que entendemos por cuarto de baño es algo totalmente distinto: el WC tiene un sitio único y propio, mientras que el receptáculo para bañarse/ducharse está separado.

En contra de lo que pueda parecer, normalmente se ahorra espacio con esta iniciativa, prescindiendo de lugares innecesarios.

Pese a que en muchos establecimientos mantienen váteres “a la antigua usanza” que son unos agujeros longitudinales excavados en el suelo -no exactamente como los que se podían ver en España, con las huellas de Neil Armstrong- sin mucho glamour precisamente, la inmensa mayoría posee, en su lugar, aseos último modelo con unos recursos que harían palidecer a los del mismísimo MacGyver (desde leds para iluminarlo, hasta calienta posaderas, desde una función con agua, a modo de bidé -ahorrándose este elemento por el camino-, hasta aire para secarse y mil ideas más). 

Los propios aparatos incluyen unos botones para manejarlo pero incluso dentro de la vanguardia hay categorías y actualmente, la mayoría de marcas abogan por colocar los mandos separados, a la altura del papel higiénico, supongo que para darle algo que leer al rey del trono, ya que los botes de champú, como decía, están en otra estancia. 

Sólo le falta dar los buenos días
Lo gracioso radica en aquellos lugares en los que están ambos, el antediluviano y el futurista a modo de 1, 2, 3 de las necesidades fisiológicas: hay que elegir bien, porque lo contrario supone la ruina más absoluta. Con eso y con todo, habrá quien elija el primero, que hay gente para todo. 

- ¿Y algo como el Roca de toda la vida?, ¿No gastan de esos?
- Por supuesto (mochiron, que le dicen aquí). 

Una vez más, nos llevan años de ventaja en lo que a tecnología y reciclaje se refiere y, aunque parezca una obviedad y nos lo vendan como auténtica novedad en Occidente, las compañías japonesas llevan ya lustros incluyendo el lavabo en el váter, ahorrando espacio y agua por el camino. De este modo, al tirar de la cadena, se activa el mecanismo y el grifo comienza a funcionar, para llenarla de nuevo, permitiéndonos lavarnos las manos por el camino.

Haciendo cuentas, en muchas ocasiones el váter acaba siendo váter propiamente dicho, bidé y lavabo. Un 3 en 1 que ni el famoso desengrasante.

El aprovechamiento es máximo en los baños y fuera de ellos
Los urinarios públicos (masculinos) suelen ser por lo general más bajos que en Europa (cuestión de altura, supongo) y llegan hasta el suelo, en lugar de terminar a media altura. No es una gran revolución, pero sí que es una de las primeras novedades que contempla el visitante extranjero en Japón, ya desde el aeropuerto.

Los cuartos de baño están divididos en dos secciones perfectamente diferenciadas, pese a tratarse del mismo sitio: la bañera, normalmente pequeña, aunque se puede llenar hasta que rebose, ya que todo el espacio es susceptible de ser mojado, y una ducha con dos alturas, porque la costumbre japonesa es ducharse sentado. 

Carente de glamour, el váter clásico es simple y funcional
A tal efecto, en los baños suele haber 3 elementos que no existen normalmente en el resto del mundo: una tina y un taburete pequeño, ambos de plástico o de madera, pero siempre a juego, del mismo modo que en los onsen o balnearios ya comentados con profusión en otro post, para sentarse y lavarse, como es natural. 

El último es una especie de cortina/persiana para cubrir la bañera y mantener el calor en su interior. 

Las bañeras y las duchas, para no sentirse inferiores a sus vecinos de porcelana, también suelen incluir botones y tecnología suficiente para mirar con descaro a un móvil de otra generación o un ordenador pequeño.

Muchos países europeos disfrutarán de la sobremesa, con un Oporto, un pacharán o el té de las 5. En América latina se estarán levantando, preparándose para un fin de semana lleno de aventuras mientras publico, pero en Japón es de noche ya, así que toca lavarse los dientes, un pis ¡Y a la cama!

Hasta la próxima semana.

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